Durante una eyaculación, un hombre puede liberar hasta 200 millones de espermatozoides, de los cuales solo uno suele cumplir con su objetivo: la fecundación. Te contamos algunas curiosidades sobre el esperma que quizás no conocías y que seguramente te sorprenderán.
Los espermatozoides se descubrieron en el siglo XVII
Los espermatozoides no fueron descubiertos hasta 1677, cuando el holandés Antony van Leeuwenhoek informó haber visto “animalillos” moviéndose como anguilas en una muestra de su propio semen bajo la lente del microscopio. Luego de su anuncio, el científico se apresuró a asegurar a sus lectores que la muestra provenía de un “exceso de semen” producto de sus relaciones conyugales y no por la masturbación, algo muy mal visto en la época.
Los espermatozoides pueden tener deformaciones
Según algunos estudios, solo alrededor de un tercio de los espermatozoides tienen el aspecto “normal” que todos conocemos. El resto suele tener múltiples deformaciones que pueden aparecer en cualquiera de las tres partes del mismo, la cabeza, la pieza intermedia y la cola. Por ejemplo, existen espermatozoides con dos cabezas, con cabezas muy pequeñas o demasiado grandes, pueden tener el cuello doblado, la cola rota o en espiral, e incluso múltiples colas. Si estos espermatozoides pierden eficiencia debido a sus deformidades o no es un tema que aún se debate.
La calidad del esperma responde a la dieta que tengamos
Los alimentos que consumimos pueden influir en la calidad del esperma más de lo que muchos imaginan. Un estudio en EEUU demostró que los hombres mayores de 40 años con dietas altas en vitamina C, tenían un 20% menos de daños en el ADN que los espermatozoides de los que no tenían esta dieta. Los antioxidantes, la vitamina E y el zinc tienen efectos similares y propician un esperma de mucha mayor calidad, sobre todo en hombres de edades más avanzadas.
La voz grave y la cantidad de espermatozoides
Los hombres con voz grave y profunda suelen ser mucho más atractivos para la mayoría que los de voces más aguda, ya que desde tiempos ancestrales se asocia con fortaleza y fertilidad. Sin embargo, los estudios han demostrado que, en la mayoría de los casos, los hombres con voces graves suelen mostrar un menor conteo de esperma que aquellos de voces más agudas. La voz grave suele ser producto de una mayor cantidad de testosterona, pero un exceso de esta hormona puede impedir a su vez que se incremente la producción de esperma.
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