Ahí van unos consejillos para realizar una buena mamada:
No solo existe el pene
Lo importante para empezar a hacer una felación es tener en cuenta que no debemos centrarnos únicamente en el pene. Los testículos, el perineo o las ingles son zonas donde le encantará que te detengas con caricias, besos o incluso con tu respiración.
El papel de la lengua
No tengas miedo a jugar con la lengua, haciendo diferentes movimientos y en diferentes zonas. La lengua juega un papel fundamental en el sexo oral. Da golpes con la lengua al glande o pásala alrededor, mientras más movimientos hagas más divertido y placentero será este momento.
Labios y mano
Cuando introduzcas el pene en tu boca, utiliza únicamente los labios y la lengua (cuidado con los dientes). Presiona con los labios y utiliza también la mano para dar más placer.
Conócelo
No sabemos si existe el pene perfecto, pero sí está claro que existen de todo tipo de formas. Adáptate al suyo, conoce lo que le gusta y el ángulo que más placer le da. Es cuestión de tiempo llegar a saber cómo es la mamada perfecta para él.
Contacto visual
Lo ideal es mantener el contacto visual mientras haces una felación. A él le excitará que lo mires a los ojos y a ti te servirá para saber cómo reacciona a tus movimientos.
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